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Photo of Lynn by Bill Pugliano, Oct. 11, 2000
a pesar de un intenso rechazo y estigma social por el mero hecho de desear ser ella misma,
Lynn Conway es una afamada pionera en el campo de diseño de chips microelectrónicos. Sus innovaciones desarrolladas durante los años 70 en el Centro de Investigación de Palo Alto de la Xerox en los Estados Unidos (acrónimo inglés: PARC) han causado un enorme impacto en el diseño de chips a nivel mundial. Un sinfín de compañías especialistas en alta tecnología, así como numerosos métodos informáticos, se basan en su trabajo.
Miles de diseñadores de chips han aprendido su oficio con la ayuda del libro Introducción a Sistemas VLSI del cual Lynn es la co-autora junto con el Profesor Carver Mead de Caltech. Miles más han desarrollado sus primeros proyectos de diseño VLSI utilizando el sistema de prototipos estatal denominado MOSIS que se basa de forma directa en el trabajo realizado por Lynn en PARC. De hecho, una gran parte de la evolución en el diseño de chips de silicio en los últimos tiempos ha sido fruto de su trabajo.
Lynn ha sido galardonada con muchos premios y distinciones en reconocimiento de su labor y ha sido nombrada como Miembro de la Academia Nacional de Ingeniería de los Estados Unidos que constituye el máximo reconocimiento profesional al alcance de un ingeniero.
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Lo que nadie sabía hasta ahora es que además Lynn realizó una investigación pionera en IBM en los años 60. Recién licenciada, ella creó un importante método de lanzamiento fuera de secuencia de múltiples instrucciones por ciclo de máquina en los llamados "superordenadores". Una vez resuelto este problema fundamental de la arquitectura de ordenadores allá por el año 1965, ella hizo posible la creación del primer auténtico ordenador "superescalar" y participó en el diseño del mismo para IBM. Lynn denominó su creación "dynamic instruction scheduling" (DIS).
Llegados los años 90, los chips contenían suficientes transistores como para albergar ordenadores superescalares en chips individuales. De repente el invento de DIS que Lynn había creado empezó a utilizarse en casi todos los chips de los nuevos PCs más potentes y así se incrementó la potencia de éstos en un grado muy superior a lo que, de otra forma, hubieran tenido. Así pues, el trabajo de Lynn de nuevo había causado otro gran impacto en la revolución moderna de la tecnología de los sistemas de información.
La mayoría de los ingenieros informáticos creían que en DIS se plasmaba el resultado de décadas de trabajo y no tenían la menor idea de que ya había sido inventado en el año 1965. Para Lynn fue motivo de gran angustia personal y profesional el hecho de comprobar que su maravilloso descubrimiento fuera utilizado en todo el mundo además de ser descrito y comentado en todos los libros especialistas en arquitectura informática sin que nadie supiera que fue idea suya.
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¿Cómo pudo ocurrir este aparente descuido? ¿Por qué Lynn guardó silencio durante más de tres décadas sobre su trabajo realizado para IBM?
La respuesta es que mujeres como Lynn han vivido, sobre todo en el pasado, sumergidas en un holocausto de estigmatización, persecución y violencia hacia su persona. Sencillamente no podía revelar su verdadera identidad sin correr grandes riesgos físicos y enormes perjuicios en lo que se refiere a su carrera profesional y relaciones personales.
Es que Lynn nació varón y fue educado como tal. Fue un terrible y trágico error dado que ella tenía el sexo cerebral del género de identidad femenino. Sin embargo allá por los años cuarenta y cincuenta el conocimiento sobre estos fenómenos era nulo por lo que Lynn se vio obligada a crecer como niño. Ella lo llevaba lo mejor que podía aunque sufría sobremanera por lo que le ocurría. Aún vivía como varón y tenía nombre masculino cuando trabajaba en IBM.
Finalmente después de muchos años intentando conseguir ayuda, en 1966 conoció al médico pionero Doctor Harry Benjamin, poco después de que éste publicase su magistral libro El Fenómeno Transexual. Fue el primer libro que analizaba la verdadera naturaleza de la aflicción de configuración errónea de género que Lynn padecía además de ofrecer soluciones médicas paliativas.
Con la ayuda del Dr. Benjamin, Lynn inició su tratamiento médico en 1967. Ha sido una de las primeras mujeres transexuales en recibir una terapia de sustitución hormonal y la reasignación quirúrgica para lograr la transformación completa de su cuerpo del sexo masculino al femenino. Desgraciadamente poco antes de someterse a la cirugía para la reasignación de género en 1968, Lynn fue despedida de IBM a causa de su transexualidad y perdió todos los vínculos con el importante trabajo que había desarrollado allí.
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El caso de Lynn hizo historia en IBM. El hecho de que uno de sus profesionales quisiera someterse a un "cambio de sexo" dejaba a los directivos de IBM de piedra. La mayoría de las mujeres transexuales que pedían ayuda por aquel entonces procedían del mundo del espectáculo o bien trabajaban como prostitutas. En aquella época, sólo las que tenían una total confianza en poder pasar como mujer o aquellas otras que estaban desesperadas y no tenían nada que perder, se atrevían a dar el paso y cambiar su sexo. Cuando la noticia de lo que Lynn estaba haciendo llegó a los oídos de la dirección de IBM, fue despedida ipso facto en un torbellino de animadversidad. Podemos afirmar con casi total certeza que la decisión fue tomada por el mismísimo T. J. Watson, Jr.
Lynn había conseguido reunir un escaso y frágil apoyo por parte de su familia y algunos amigos. Sin embargo cuando fue despedida por IBM todos perdieron la confianza en lo que ella estaba haciendo y su sustento se quebró. Lynn se marchó al extranjero para someterse a cirugía completamente sola. Había perdido no solo una carrera y una consolidada reputación profesional sino además su familia, parientes, amigos y compañeros. Miraba con miedo hacia un futuro lleno de incertidumbres sin un alma en el mundo a quien recurrir para ayudarla, salvo el equipo médico.
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Cuando Lynn regresó concluyó su transición social y adoptó un nuevo nombre. Inició de nuevo su carrera desde cero, como simple programador carente de pasado. Es una superviviente con mucho espíritu y se adaptó perfectamente a su nuevo papel en contra de todas las predicciones nefastas realizadas por los ejecutivos de IBM y su familia y amigos que la habían abandonado. Sola, emprendió su camino en el mundo, entablando nuevas amistades y luchó por conseguir el éxito en su nueva vida.
Con gran sorpresa Lynn encontró una nueva felicidad en una vida tan llena de esperanza después de su transformación que su carrera subió a pasos agigantados. Ascendía rápidamente mediante una serie de cambios sucesivos en diversas compañías hasta aterrizar en un proyecto de arquitectura de ordenadores para Memorex en 1971. Posteriormente en 1973 se incorporó al emocionante proyecto del nuevo Centro de Investigación de Xerox en Palo Alto en el momento de su constitución y puesta en funcionamiento.
En 1978, diez años escasos después de su transformación, Lynn estaba en el umbral de la fama internacional en su campo de innovaciones VLSI. Por aquel entonces estaba trabajando en un importante libro de texto sobre esta materia y se dirigía a M. I. T. para impartir el primer curso prototipo sobre los sistemas VLSI.
En menos de dos años, las universidades de todo el mundo habían tomado como referencia su libro de texto para cursos de estas características. El Ministerio de Defensa inició un nuevo e importante programa para subvencionar y potenciar la investigación en el campo iniciado por Lynn. Decenas de nuevas compañías comenzaron a formarse con el objeto de comercializar estos conocimientos. Todo esto ocurrió sin que nadie descubriera su pasado mantenido en secreto. De no ser así probablemente nunca hubiera sobrevivido ni logrado estas metas.
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Durante los años 80 y 90, Lynn progresó aún más y empezó a disfrutar de una carrera profesional muy variada e influyente y al nivel personal de una vida que le llenaba de alegría y satisfacción, aventura y plenitud. En la actualidad es catedrática y profesora emérita de Ingeniería Eléctrica y Ciencias Informáticas en la Universidad de Michigan en Ann Arbor, donde además ocupó el cargo durante muchos años de Decano Asociado de la Facultad de Ingeniería. Reside en una gran finca en la zona rural de Michigan con su compañero de hace muchos años.
Sin embargo durante 31 años después de la transición, Lynn guardó celosamente su vida anterior viviendo "en encubierto". Tan solo sus amigos más íntimos conocían su pasado. De hecho Lynn sabía de otras mujeres transexuales que habían sufrido un ostracismo social, relegadas a los guetos, las cuales habían sido objeto de abusos, maltratos, violaciones y asesinatos o bien fueron conducidas al suicidio cuando se les había leído o descubierto por gente brutal y llena de odio.
Durante años Lynn vivía con una sensación constante de amenaza, riesgo y peligro, temerosa de que si su pasado saliese a la luz, podría perder sus derechos civiles, legales, y laborales y que sería objeto de distanciamientos en sus relaciones personales y profesionales.
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Por fin en 1999, los historiadores de la informática dieron con su trabajo inicial realizado para la IBM. Consiguieron relacionarlo con Lynn y su pasado fue revelado ante sus compañeros. Con un miedo comprensible en un primer momento, empezó a pensar que quizás los tiempos habían cambiado lo suficientemente como para que ya no debería de tener miedo de darse a conocer. Desde luego, Lynn no tiene nada de qué avergonzarse y de hecho está muy orgullosa de los éxitos cosechados tanto en su vida personal como en su carrera profesional.
No obstante Lynn ha comprobado con tristeza y desilusión el trato poco humano que aún reciben las mujeres transexuales por parte de sus padres, parientes, compañeros de trabajo, el sistema jurídico y la sociedad en general. El rechazo frontal de las adolescentes transexuales por parte de sus familias es particularmente trágico, sobre todo porque con frecuencia dicho rechazo se produce cuando estas chicas lanzan su primer grito de ayuda y les puede condenar durante años a una existencia marginada.
Lynn empezó a pensar que quizás su historia podría servir como testimonio y ayuda a las demás. Las opiniones de la sociedad y los problemas que generan son en parte producto de una percepción mediatizada. Las imágenes de los transexuales proceden a menudo de historias sobre la transición. Es un momento en el que los medios de comunicación suelen fijar la atención sobre los detalles más morbosos, chocantes y a veces vergonzosos de un cambio de sexo. En la superficie las historias son aparentemente compasivas con el sujeto pero con frecuencia transmiten una imagen patética. Los lectores terminan compadeciéndose de "las pobrecitas" y ¡por supuesto no les agradaría que esto ocurriera con alguien de su familia!
El verdadero mensaje que no se transmite es el milagro de la liberación de encarcelamiento dentro de un cuerpo masculino que experimenta la chica transexual y la felicidad posterior que consigue como mujer. La gente nunca tiene conocimiento de las decenas de miles de mujeres post-cirugía que viven entre nosotros y que tienen éxito en su vida y están plenamente aceptadas e integradas como mujeres normales. El público simplemente nunca ve estas otras historias felices.
¿Por qué será? La respuesta es porque todas estas mujeres viven ocultas exactamente igual como hacía Lynn, atemorizadas de lo que podría ocurrir si su pasado fuera descubierto. Mientras tanto decenas de miles de jóvenes transexuales pre-cirugía viven presas del temor y la duda acerca de su futuro. A menudo son rechazadas por sus familias y pierden sus empleos tal como le pasó a Lynn, cuando logran identificar su problema y buscan soluciones médicas.
Lynn es el primer caso con éxito que ha salido a la luz para contar su historia después de un largo período. Su testimonio pretende dar esperanza a las jóvenes transexuales. Puede ayudar a los padres a imaginar un futuro feliz para una hija transexual, sobre todo si estuvieran dispuestos a apoyar los esfuerzos de su hija para transformar su cuerpo "de chico" y empezar a ser mujer a una edad más temprana. También su historia puede hacer reflexionar a las empresas antes de despedir a una persona a causa de su sexo.
Llegará el día en que la transformación de género ya no se percibirá como un acontecimiento triste, penoso, vergonzoso y trágico, sino como un maravilloso milagro de renacimiento a la vida para seres tan desafortunados que han sufrido un género equivocado desde su nacimiento. Lynn espera ansiosa el amanecer de ese día.
Si desea más información sobre cuestiones de transgénero, transexualidad e intersexualidad, consulte TG/TS/IS Info (en espanol)
Si desea más datos sobre el currículum de Lynn, consulte su BioSketch.
Si desea saber más de su historia, consulte su Retrospective
y también la siguiente página de Lynn:
http://ai.eecs.umich.edu/people/conway/conway-Spanish.html (en espanol)
Martes 9 de Noviembre de 2001
Fin de la traduccion